Hoy nos adentramos en la ESCALERA DEL MUSEO DE BELLAS ARTES (BBAA) de Córdoba. Para entenderla mejor tendremos que echar la vista atrás y remontarnos al origen del edificio en el que se ubica que, antes de ser este museo, fue Hospital llamado de la Caridad de Nuestro Señor Jesucristo.

Ahí van algunas, solo algunas, curiosidades de él. Perteneció a la cofradía vinculada a la orden de san Francisco radicada en el convento de san Pedro el Real que estaba muy cerca de aquí – queda de él la vecina iglesia de san Francisco y la mitad de su claustro, hoy convertida en plaza, anexa – (no dejes de ir a comprobarlo a escasos 50 metros). Así que son monjes franciscanos los “médicos” encargados de cuidar de los enfermos y de gestionar el funcionamiento del centro, también dedicado a la redención de los cautivos- ya verás cómo el sello de la Orden está presente  en la escalera.

Los mismísimos Reyes Católicos se interesaron activamente por este hospital, dándole en 1483 nada más y nada menos que el privilegio de ser Patrimonio Real pasando a considerarse ellos mismos fundadores de su cofradía – aunque había sido fundada por Enrique IV años antes- . Llegó a alcanzar enorme prestigio y proyección en la ciudad, para  pertenecer a ella había que demostrar limpieza de sangre, por lo que fueron Hermanos de la cofradía importantes personajes de la nobleza local. Ser noble y cristiano viejo parecería que lo uno lleva necesariamente a lo otro…. (¿o quizá no??)  

Esos años en que los Reyes Católicos residen en Córdoba – donde quedará instalada la Corte- son un periodo decisivo para nuestra ciudad y para la historia de España: en el Alcázar, su residencia, nació su hija María – que llegaría a ser reina de Portugal -, recibieron a Cristóbal Colón que les pide respaldo y financiación para su ruta alternativa a las Indias (aunque, a pesar del interés que les despierta el proyecto, tienen que “darle de largas”, concentrados sus regios esfuerzos como estaban – desde la ciudad como base de operaciones y punta de lanza del reino de Castilla – en planificar militar y diplomáticamente  la conquista del último reducto musulmán en la Península ibérica, el reino de La Granada.)

Además de orden franciscana y de los Reyes Católicos como sus protectores y patrocinadores, también estará vinculado a este Hospital el padre del Genio de las Letras españolas, que aquí trabajó como cirujano sangrador a mediados del s. XVI.placamigulecervantes La relación de Miguel de Cervantes con Córdoba está sobradamente avalada – la placa de azulejo en la plaza del Potro lo recuerda ¿la has localizado? -: por sus antepasados cordobeses, porque en nuestra ciudad vivió sus años de niñez y aprende sus primeras letras, – (de hecho él mismo se llamó “natural de Córdoba”) –  y sabemos que volverá varias veces en su vida, y se alojó en la posada del Potro. Este entorno urbano tan efervescente  en el que estamos, el de la Plaza del Potro (poblada de mesoneros, viajeros, mercaderes, mancebía, etc) fue seguro una fuente de inspiración para él, no solo como escenario de algunos episodios concretos de el Quijote, por ejemplo, sino porque era un ambiente «sin desperdicio», un caldo de cultivo inagotable de palpitantes historias y tipos humanos, con sus miserias, con sus grandezas… que el carismático talento de Cervantes supo dar forma literaria, inmortalizándolos brillantemente en su novela picaresca. ¡La plaza del Potro! Aquí uno se espabilaba rápido si o si y aprendía a que no se le engañara con facilidad, ya lo expresaría en 1585 Luis de Góngora en una de sus letrillas “busquen otro, que yo soy nacido en el Potro”.

 Este paréntesis literario ha merecido la pena, verdad? ya volveremos sobre el tema.

¿Hasta cuando fue hospital? hasta 1837. Después de varios usos, – incluido el de casa de vecinos – con las correspondientes transformaciones para adaptarlo a sus nuevas necesidades y moradores – en 1862 la Diputación de Córdoba se lo cede a la Comisión de Monumentos para que instale aquí los museos y la Real Academia… ¿Sabías que en este edificio estuvo el germen, el punto de partida, de numerosas instituciones culturales de la ciudad? la Real Academia, la Biblioteca Provincial, el Conservatorio de Música, el Museo Arqueológico,  la Escuela de Artes y Oficios, etc. Al nacer compartieron espacio, éste. Hoy con sede y andadura propia cada una.

cubiertaartesonadoPero… volvemos a los siglos medievales, ¿Qué queda de ese primitivo hospital que fue?  aparte de la distribución arquitectónica general en torno a patio – que hoy acoge dos museos, éste de BBAA y el de Julio Romero de Torres, enfrente -,  el cuerpo principal  del actual museo, debió estar destinado a la sala de enfermos graves o incurables –en esencia, ahí está – y hay, principalmente, dos evidencias más, pero vamos directamente a la monumental escalera y dejemos para el final… las otras.

Mira para arriba, su cubierta de ARTESONADO, de madera, es una artística armadura de lazo de traza mudéjar, todo un alarde de destreza compositiva y matemática aplicada para el encaje impecable de sus piezas que en perfecta geometría, se entrelazan dibujando estrellas, como si un fragmento de bóveda celeste se abriese sobre la escalera. Alrededor localizarás un cordón como emblema de la orden franciscana.  ¿Lo ves? Además de otros elementos, como un friso de escudos pintados alrededor.

Las paredes tienen unas PINTURAS MURALES impactantes por su estado de conservación, dimensiones, sus protagonistas y mensajes… Pueden fecharse en el s. XV. Observa cómo parecen esculturas… el autor, anónimo, consigue dar efecto de relieve a las figuras, lo logra mediante un claroscuro a base de jugar con tonos parecidos a los de la propia piedra – el gris, el amarillo oscuro – en diversas gradaciones. Esta técnica se llama grisalla.

Subiendo a la izquierda nos encontramos un santo. Se trata de SAN JERÓNIMO PENITENTE: medita semidesnudo ante la cruz (así representado le “da juego” al artista para desplegar plásticamente sus conocimientos de anatomía) mientras empuña una piedra con la que se está mortificando y a sus pies una calavera hace de atril que sujeta un libro abierto. Está en el desierto, le acompaña un león, todo ambientado en un paisaje de fondo con un árbol y un edificio… Falta pintura, así que nos preguntamos qué otros elementos habría (pero se han perdido para siempre…), que enriquecerían la composición. Es el patrón de los traductores, sabes ¿por qué? si investigas en su vida lo sabrás así como por qué se refugió en el desierto. Seguro que has tenido áridos “desiertos” que atravesar en tu vida, y de ellos has aprendido y salido fortalecido.

sanjeronimopenitente

sanfranciscodeasis

Enfrente, nos recibe, ¡no podía faltar! SAN FRANCISCO DE ASÍS modelo atemporal venerado mas allá de creencias y de la propia Edad Media en la que vivió, como renovador cristiano centrado en la pobreza, el amor a Dios, la fraternidad… ¡Ahí está! descalzo, sin más atavío que una túnica ceñida con una cuerda llevando sobre sí, dando ejemplo, el modelo de vida sencillo que predicaba basado en los ideales de los Evangelios.

En el rellano, como telón de fondo escenográfico, tenemos un CALVARIO y ¡parte de otro!…. esto se merece una aclaración: el situado más centrado en el lienzo de la pared sería el primero y más antiguo, se decidiría después abrir una ventana para dar más amplitud visual y luminosidad a este punto (quizá puedas ver la calle que se abre mas allá, su nombre hace referencia a un oficio gremial…) lo que “romperá” la composición y obliga a rehacer el dibujo, para adaptarse al nuevo espacio disponible. A los pies de Jesús Crucificado, en el Gólgota,a las afueras de Jerusalén, María Magdalena y san Juan Bautista le acompañan en contenido sufrimiento.

No pases por alto los CIRCULOS CONCÉNTRICOS enigmáticos e interesantestextocirculos sin duda, son también “de época”… Curiosamente, aparecen recurrentemente en otras culturas como símbolo de eternidad, (en el panel a su lado lo explica mejor). Los autores serían los propios enfermos… ¿quizá allí ubicados en un momento de hacinamiento?, enfermos que con su Crucificado enfrente y cada uno con su propia cruz a cuestas (quizá doloridos, sintiéndose solos, desesperados, aburridos, reconcentrados en horas interminables, o a ratos un poco de todo ello) encontrarían en estos dibujos  vía de escape para desahogarse, decir «aquí estoy yo» reivindicándose,… matar las horas en una época sin entretenimiento tecnológico ninguno (tele, móvil etc)  ¿Qué te parecen? Enfermos que, con esas anónimas conmovedoras firmas que resuenan todavía hoy, han conseguido hacer historia y ser contra pronóstico, también, «inmortales» protagonistas de este enclave.

circulosconcentricos

¿Qué otros elementos sobreviven del hospital en el Museo? su antigua CAPILLA, convertida en la sala de arte Barroco: ¿Te parece que conserva su esencia de iglesia – en la propia estructura de la nave, en la bóveda,  incluso la acústica, seguro que si. Sitúas donde estuvieron el altar,  y el coro?-. La cripta en el suelo, permite leer quien descansa allí y a quienes está dedicada. Te sientes observado por las sibilas de la cúpula? son más contemporáneas, las pintó Rafael, el hijo de Julio Romero de Torres.  Nos queda «original», en tercer lugar, su PORTADA, para verla tienes que salir a la plaza del Potro, ya que no tiene correspondencia ya al interior, dentro de la ahora «Sala de Barroco» aunque si te invito a que intentes ubicarla, es decir, ¿en qué punto exacto se accedería desde la calle a la iglesia, abierta a los vecinos

         No dejes de visitar nuestro Museo de Bellas Artes, con una valioso patrimonio que merece más detenimiento, por los autores aquí presentes y sus obras de categoría, la colección de dibujos es especialmente relevante. Seguiremos hablando de él, razones no nos faltan.

Localizacion Museo Bellas Artes